Obtener un piel hidratada y suave es el resultado de un cuidado diario. Ser constantes a la hora de mimar nuestra piel es importante para conseguir lucir una piel bonita y saludable.
Lo primero es conocer nuestra piel para saber cómo tratarla adecuadamente según sus necesidades. Para ello, debemos estudiar nuestra piel atendiendo a una serie de pautasque nos ayudarán a discernir qué tipo de piel tenemos.
Para cuidar tu piel correctamente el primer paso es conocerla. Seguro que cuando llegas a la sección de hidratantes de Consejos Salud no sabes qué crema hidratante elegir ¿para piel mixta? ¿grasa? ¿seca? ¿sensible? En este post hoy te daremos algunas pistas que te ayudarán a dar respuesta a estas preguntas y a conocer cual es tu tipo de piel. Continuar leyendo “Cómo saber qué tipo de piel tengo”
La piel es el mayor órgano del cuerpo humano que protege al resto del organismo de las agresiones externas. Teniendo en cuenta que la piel queda expuesta diariamente a la polución, el sol, los cambios de temperatura, aires acondicionados, etc. debemos aportarle una ayuda extra a su protección natural para así evitar la sequedad, tirantez, irritación y evitar a su vez el envejecimiento prematuro ( arrugas, flacidez, etc.)
Para ello es importante una hidratación completa, tanto desde el interior como desde el exterior.
La hidratación de la piel
– Para mantener una piel sana e hidratada, es necesario beber un mínimo de 8 vasos de agua al día para así hidratarla desde el interior, además de mantener una alimentación sana con una mínima cantidad diaria de frutas y verduras.
– Desde el exterior es muy importante hidratar nuestra piel a diario. Debemos tener mayor cuidado con las zonas más expuestas a las agresiones externas como son las manos y el rostro, aplicando una crema hidratante a diario y repetir su aplicación las veces que sean necesarias.
Limpieza facial e Hidratación
Aún así, el rostro es la parte a la que debemos prestar mayor atención, así que para mantener un cutis sano y bonito necesitaremos realizar una limpieza facial diaria seguida de una crema hidratante.
Esta rutina de limpieza e hidratación se recomienda realizarla por la mañana y por la noche; Por la mañana antes del maquillaje, para preparar la piel para las agresiones externas que le esperan durante el día, (en este caso la crema debe llevar protección solar para protegernos de los rayos UV) y por la noche, tras habernos desmaquillado por completo, ya que es durante la noche cuando nuestra piel se regenera.
Eso sí, es muy importante aplicarnos una crema hidratante adecuada a nuestras necesidades; piel seca, piel grasa, mixta y/o sensible. Por ello debemos saber de antemano cual es nuestro tipo de piel.
En Consejos Salud te lo ponemos fácil, ya que puedes encontrar las cremas clasificadas por tipos de piel (seca, grasa, mixta y/o sensible).